CUANDO LOS DELINCUENTES DAN UN EJEMPLO SON NOTICIA

El testimonio de Hernan Baigorria nos demuestra que el progreso humano es cuestion de esfuerzo y fe en nuestras capacidades individuales. Aquí esta su historia.

Hernán Baigorria (25) sabe por experiencia propia lo qué es el sacrificio y lo qué cuestan los logros. El joven que acaba de recibirse de ingeniero trabajó limpiando vidrios de los autos en la calle para costearse sus estudios y actualmente lo hace de cuidacoches. Ahora sueña con poder trabajar en su profesión cosa que, siendo pobre, le costara bastante.
La crisis de finales de 2001 lo encontró desocupado y un conocido le sugirió que podía limpiar los vidrios de los autos en la calle y fue a principios de 2002 que comenzó a incursionar en este nuevo empleo. “Nunca me dio vergüenza, lo tomé como un trabajo más y trataba de que los autos quedasen limpios”, comentó. “Aunque el hijo de puta de mi conocido en vez de darme laburo en su empresa me recomendó limpiar vidrios, no le guardo ningún tipo de rencor” Con ese honesto y ejemplar trabajo Hernan dio sus primeras materias en la facultad, orgulloso comenta a Anoticiados “Cuando salía de la facultad le limpiaba los vidrios de sus autos a mis compañeros de cátedra por lo que recibí a diario numerosos y justificados insultos, pero la verdad nunca tuve vergüenza”Un verdadero ejemplo de vida para todos.Todo el 2002 trabajó en la intersección de las diagonales 80 y 77 de La Plata y se llevaba $7 u $8 de ganancia por cuatro o cinco horas diarias. Fue en ese momento que, junto a otros tres compañeros, alquiló un departamento cerca de la universidad. Tenia la firme convicción de que trabajando se puede progresar en la Argentina. Y vaya que no se equivoco! Emocionado continua: “En ese momento con mis compañeros de departamento fantaseamos con la idea de instalar un prostíbulo. Ya sabes, esa idea nefasta de hacer guita fácil. Ellos habían conseguido todo, las paraguayitas, la complicidad de la bonaerense, todo. Pero yo me opuse porque si bien eso nos convertía en gente con mucho dinero afeaba la imagen de Good Boy que yo quería tener para los medios. Soñaba en ese momento con aparecer en la sección “Ejemplos” de la revista Viva”
A fin de ese año una profesora le consiguió una beca y se desempeñó durante dos años en el área de mantenimiento de su facultad a modo de una pasantía que duró dos años. Cuando finalizó ese contrato fue contratado como encargado de un edificio en el 2005 hasta que consiguió una nueva pasantía de verano en Siderar, una empresa siderúrgica de la Argentina, que sólo duró tres meses, a todo esto Hernan le comento a Anoticiados:“Fue una hermosa experiencia. Por la noche reparaba y limpiaba todo lo que mis compañeros de cátedra dejaban sucio. Limpiaba las latas de cerveza, los preservativos que en verano dejaban tirados en los bosques de la facultad de La Plata etc. Cuando entre como encargado de edificio les seguí limpiando la mierda a los padres de ellos y hasta a alguno de ellos, que ya habían progresado y se habían comprado el departamento con su primer trabajo de Ingenieros Juniors. La verdad que igual siempre me sentí orgulloso y nunca tuve vergüenza siguiendo firme en mi creencia de que el saber es progreso. En la siderúrgica podría haber ganado algo de plata pero me echaron cuando pedí los días por estudio lo que me confirmo que si no estudiaba no progresaba".
Sin embargo, Hernán necesitaba seguir en actividad para poder aportar en los gastos del departamento y para abonar los últimos apuntes de las materias de su carrera. Fue por ello que en mayo de 2006 fue empleado en una concesionaria en La Plata. “Yo quería terminar lo antes posible para poder trabajar en lo mío, me faltaba sólo la tesis, pero llegaba muy cansado a casa”, sostuvo el joven. “En la concesionaria trabajaba 12 horas por día con un solo día de descanso y como me me habían aumentado el alquiler un 200 por ciento no me quedaba otra. Tuve serios problemas de salud que por suerte un ex compañero de facultad, que ahora ya estaba haciendo hace dos años la carrera de Medicina, me socorría recetándome genéricos a muy bajo precio. Solamente me quedaba el sábado a la noche para ver si podía poner algo de pilas en la tesis. Fue terrible. Al final otro ex compañero mió que ya se había recibido hace 4 años me dejo quedarme en una habitación que no ocupaban sus hijos en su casa. Me la alquilaba a un módico precio y pude mudarme ahí. Por suerte decidió ser magnánimo (como Brad Pitt con su mucama en la película Babel) y no recordar las veces que le había ensuciado el parabrisa del auto. Eso me dio fuerzas para seguir aunque al mes tuve que irme porque la esposa quedo embarazada de nuevo”
Fue entonces que en enero de 2007 volvió a pedir una beca en el Centro de Estudiantes, donde está viviendo, y comenzó a cuidar los autos de la cuadra. Hace una semanas se recibió de ingeniero tras aprobar la tesis sobre Centrales de Esterilización Pública.
“Hace un par de semanas empecé a buscar trabajo y ya tuve un par de entrevistas pero aún no tuve novedades”, se ilusionó Hernán, que desearía ser contratado por alguna empresa como "joven profesional" “Para que no me exijan la experiencia que no tengo”.
Nos ha relatado tambien emocionado: “No me han llamado aun de ningún lado, pero no me importa, tengo fe en el esfuerzo. Me piden experiencia pero claro, no tengo ninguna. La semana pasada deje currículo en al empresa de un compañero mió de primer año de la facultad de Ingenieria pero me dijo que me faltaba experiencia y que lo único que tenia en ese momento eran puesto en la parte de maestranza. Es entendible, ya no soy tan joven y como profesional no tengo casi nada de experiencia. Mis ex compañeros trabajan en empresas afines desde que empezaron la facultad y ademas deben tener mejores condiciones intelectuales que yo, por eso han progresado”
El muchacho, que se mostró interesado en desempeñarse, en un futuro, en la industria automotriz o en seguridad e higiene, continúa trabajando como cuidacoches y actualmente saca unos $10 por día hábil y hasta $25 los sábados.

Conclusión

La seccion de ejemplos de vida desapareció ya de la Revista Viva para darle paso a la columna de Beatriz Sarlo. Una verdadera lastima para Hernan.
Pero mas allá de esto, este chacobusense nos ha demostrado que alguien que, por su condición, esta destinado a ser un mal viviente, puede realizarse en la vida y recibirse con un titulo, si pone fe empeño y perseverancia. Muchos lectores de Internet aplauden su gran ejemplo social. "SI UNO QUIERE PUEDE", hagamos de este lema nuestro motor de acción cada día.
Pucha, ya me emocione.